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La herencia de Shakespeare

¿Qué herencia deja Shakespeare? ¿Qué tiene que decirnos hoy?

Finaliza el mes de abril al que hemos dedicado las Letras Prestadas de este blog alrededor de la celebración del Día Internacional del libro, el pasado día 23. Han sido varias entradas dedicadas a las bibliotecas, los libros y la figura de Cervantes, encarnada sobre todo en su universal Don Quijote.




Dos grandes autores, el citado español y William Shakespeare tienen marcado en el calendario la coincidencia en su fallecimiento, como si el destino hubiera querido juntar a tan grandes figuras en el momento que pasaron de la vida a la eternidad de las letras. Lo cierto es que de ninguno hay constancia de que su óbito fuera en la citada fecha. De Cervantes se conoce la fecha de su enterramiento por la que se deduce su fallecimiento. Del escritor inglés, la confusión proviene del uso del calendario gregoriano que no se adoptó en Inglaterra hasta mediados del siglo XVIII.




El crítico Harold Bloom, autor del controvertido El canon occidental sitúa a Shakespeare y Dante como los máximos genios en "precisión cognitiva, energía lingüística y poder de invención". El dramaturgo inglés posee, además la capacidad de crear verdaderos personajes, de hacer que éstos trasciendan del escenario como personas que se escuchan a sí mismos o entre ellos y que pasen a formar parte del imaginario colectivo de la sociedad occidental.

¿Quién no ha oído y no tiene una idea de quienes son Hamlet, Macbeth, Otelo o el Mercader de Venecia? ¿Quién no reconoce a Romeo y Julieta, Julio César o Antonio y Cleopatra? ¿Quién no sabe de Las alegres comadres de Windsor, El Sueño de una noche de verano, Falstaff o El Rey Lear?
En esta entrada, lejos de las grandiosas frases a las que estamos habituados, reproducimos una escena de Hamlet que aún en nuestros días, más de cuatro siglos después de ser escrita, puede servirnos en la actualidad.



Innumerables son las adaptaciones que la obra del escritor inglés ha tenido en lugares distintos a los escenarios teatrales para los que fueron compuestas. Desde las versiones cinematográficas inglesas y de Hollywood (entre las más recientes, Mucho ruído y pocas nueces o Shakespeare in Love) hasta versiones musicales como El sueño de una noche de verano, que un joven Mendelshonn comenzó a componer cuando contaba con diecisiete años y un número considerable de óperas basadas en textos suyos.

De toda la producción operística, posiblemente la más significativa pertenece a Giuseppe Verdi. El compositor italiano era un ferviente lector de Shakespeare del que llegó a estrenar versiones de tres obras, Macbeth, Otello y Falstaff. Años después del estreno de la primera llegó a escribir. "Quizá no hay captado toda la dimensión de Macbeth, pero que no lo conozca, que no lo comprenda, que no sienta a Shakespeare, ¡no, por Dios, no! Es uno de mis poetas preferidos; descubrí sus obras cuando era muy joven y no he dejado desde entonces de leerlas y releerlas".
The Globe Theater - Londres
Con setenta y seis años de edad, ya retirado de su labor compositora se embarcaba en su última obra, Falstaff
En colaboración con Arrigo Boito se fijó en este personaje, una especie de Sancho Panza inglés, un borracho barrigón (Panzone lo llamaba Verdi cariñosamente), ladrón sin escrúpulos y de una simpatía contagiosa. Sir John Falstaff aparece en tres obras del dramaturgo inglés, las dos partes de Enrique IV y Las alegres comadres de Windsor.
En febrero de 1893 se estrenó en el teatro Alla Scala de Milán con tan enorme éxito que las ovaciones finales duraron media hora. 
De esta ópera cómica de un Verdi septuagenario, enlazamos su último número, escrito en forma de una fuga que va pasando por todos los personajes de la obra en un monumental y teatral final que puede servir para recordar, como un pequeño homenaje, a los protagonistas de esta serie de entradas dedicadas a Shakespeare, Cervantes, el mundo de los libros y el teatro.



La versión pertenece a una producción del Teatro Verdi de Busseto, la ciudad natal del compositor, de 2001 dirigida por Ricardo Muti con la orquesta y el coro del teatro Alla Scala. Podemos distinguir a Ambrogio Maestri, Roberto Frontali, Juan Diego Flórez, Barbara Frittoli e Inva Mula entre otros. 


Que caiga el telón.

Si quieres seguir las entradas anteriores, puedes hacerlo a través de los enlaces: 
¿Se anticipó Cervantes a los Reality Shows?
Cómo sentir la emoción de comenzar un libro 
Tres miradas a una biblioteca y una doble canción, 
Cómo sentirte el héroe (o heroina) de tu vida con #400Cervantes.

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